El mes de abril es el mes del año por excelencia dedicado al libro, empieza la celebración con el día 2 en el que festejamos «El Día del Libro Infantil y Juvenil» como homenaje a Hans Christian Andersen. El día 23 de abril es «El Día Internacional del Libro y de los derechos de autor» declarado en 1995 por la Unesco para su celebración a nivel mundial, coincide con la muerte de Miguel de Cervantes, William Shakespeare y el cronista de «La Conquista de América» el inca Garcilaso de la Vega, aunque en España ya se venía celebrando desde el año 1926 una»Fiesta del libro» firmada en un decreto por el rey Alfonso XIII, que primero era el 7 de octubre, día en el que se cree que nació Cervantes y a partir de 1930 empezó a ser el 23 de abril y se acompañó a la efeméride de los obituarios, la tradición de Cataluña en la diada de Sant Jordi, una especie de día de los enamorados, en la que los hombres regalaban rosas a las mujeres y ellas les correspondían con libros. Desde el año 2001, la Unesco elige también cada año una «Capital Mundial del Libro» que ostentó por primera vez Madrid y que ha ido celebrándose en Alejandría, Nueva Delhi, Amberes, Turín,…este año de 2011 es Buenos Aires y después cederá el testigo, para el 2012, a Ereván, capital de Armenia.

El día 23 de abril es «El Día Internacional del Libro y de los derechos de autor» declarado en 1995 por la Unesco para su celebración a nivel mundial, coincide con la muerte de Miguel de Cervantes, William Shakespeare y el cronista de «La Conquista de América» el inca Garcilaso de la Vega.

A nivel nacional, este año, la celebración va a ser diferente porque cae Sábado Santo. Aquí en nuestra ciudad, para la celebración de «El día del Libro», suelen coincidir «La maratón de Lectura» que organiza La Casa de Cultura desde hace más de 10 años, con algunas presentaciones de libros que unas veces locales y otras con un más amplio abanico de distribución, van dejando en las librerías novedades a disposición de los lectores. También contamos con una Feria del Libro, que se instala en «El Jardín de las Palomas» o «Parque de la Constitución» y, por supuesto, contamos con las librerías locales de las que algunas han incorporado la tradición catalana de la rosa y la acompañan a nuestras compras de libros de ese día, junto a los descuentos que casi todas las librerías hacen esa semana a la hora de adquirir un libro. Otro campo de acción en la celebración son las Bibliotecas Públicas, los Colegios y los Institutos en los que esos días se realizan «minirecitales» de lecturas de poemas, actividades de fomento de la lectura, cuenta cuentos, publicaciones de revistas,…incluso ha habido años que se han regalado rosas a los alumnos en algún colegio o instituto.

En cuanto a las novedades de libros, este año coincidiendo con el 50 aniversario de la Feria del Mueble se presentó un libro: «Artesanos de la innovación» con prólogo de Juan Miguel Benedito. Es un libro amplio en el que los antecedentes históricos están escritos por Liborio Ruiz Molina, la redacción corre a cargo de Raquel Ortega Martínez y la edición es de la directora de la Feria, Inmaculada Hernández Martínez, lleva abundante material fotográfico, un listado de expositores y los carteles que han pregonado las 50 Ediciones de la Feria. Va acompañado de un DVD con testimonios, imágenes y agradecimientos. Este libro, me hace recordarotro: «Origen y evolución del mueble en Yecla (1908-1968)» Un libro de Edmundo Palop Fraile, editado por Arema en el año 2002, fruto del trabajo de doctorado del autor, que fue presentado en la Universidad Politécnica de Valencia obteniendo la calificación de Sobresaliente «Cum Laude» y que habla de nuestra historia en la industria del mueble desde los inicios hasta los primeros años de celebración de la Feria. Un libro curioso que no está mal releer para conocer nuestros orígenes y los valiosos datos que allí se encuentran, resultado de un trabajo detallado e importante de investigación.

Podríamos hablar de novedades desde las presentaciones de final de año: la edición por parte del profesor Martín Martí Hernández de «El perro loco» de Castillo-Puche, con una espectacular portada de Victoria Carpena, o la presentación de «Cicatrices» de Claudio Cerdán que estuvo el año pasado firmando este libro dentro de las novedades en La Feria del Libro de Madrid, también la presentación de «Cartas a Betty» de Vicente Palao García con ilustraciones de José Marquet Nebot. O los libros presentados en la sede de la Asociación de Mayordomos como «Las leyes espirituales» y en el pub «Bulebar» el 14 de febrero de este año: «El hada de la lluvia» de Pedro Julián Martínez y los de La Casa de Cultura: «Vínculo» de Carmen Buyolo, o el libro de poesía de Lola Vicente «Y yo también» o la novela «Sabor a ron» de Charo Cutillas o libros de autores yeclanos presentados en otras localidades como uno sobre las calles de Almansa, escrito por Alfonso Hernández Cutillas o la tercera edición de «La alimentación en Yecla» de José Mataix Verdú, un best-seller yeclano, permitidme que lo llame así por la enorme aceptación que tiene este libro, cuando se agota circulade mano en mano a través de fotocopias, los estudiantes y universitarios copian las recetas de las comidas yeclanas para celebrar «Días gastronómicos de Yecla» allí donde se encuentran y deslumbrar a amigos y conocidos con unas buenas gachasmigas o intentar emular a abuelas y madres con unas deliciosas pelotas de relleno.

Qué mejor día que el 23 de abril para hacerlo y para empezar a ver los libros no como los enemigos que imaginamos cuando hacen su aparición estelar en los años de colegio o instituto, sino como algo que forma parte de nuestra vida y que nos permite y ayuda a seguir avanzando.

Pero seguro que quedan otros libros que se escapan al conocimiento de esta lectora y que se pueden añadir a los múltiples libros locales, nacionales o traducidos para poder celebrar el día del libro, para mí, por mi origen también «la Diada de Sant Jordi». Libros de poesía, de humor, de no-ficción, novelas o biografías, estudios o trabajos varios que han tomado forma en las páginas de un libro y que abastecen de conocimientos y de imaginacióna los lectores que se deciden a abrirlos y qué mejor día que el 23 de abril para hacerlo y para empezar a ver los libros no como los enemigos que imaginamos cuando hacen su aparición estelar en los años de colegio o instituto, sino como algo que forma parte de nuestra vida y que nos permite y ayuda a seguir avanzando. Feliz «Día del Libro», Feliz»Diada de Sant Jordi».